Con más retraso del deseado, pero por fin ya estamos "al lío" de nuevo. Vuelven los madrugones, mirar de forma casi enfermiza las previsiones de temperatura y los malabares de todo tipo para afrontar logística y económicamente una nueva temporada, que de momento, ha empezado algo "coja", retrasando un poco el esperado comienzo.Tiempo de observar a los perros, de evitar estrés, sofocos o lesiones por exceso de prisa y ganas. En ésta época hay que ir con cuidado sin dejar ningún aspecto de lado que pueda truncar la pretemporada, o incluso arrastrar el problema durante más tiempo.No hay que olvidar que los perros han disfrutado de un más que merecido descanso,y que la "vuelta al cole" también puede ser dura para ellos. Mente y cuerpo están más vulnerables que en pleno invierno. Una vez más, conocer al equipo se vuelve una herramienta fundamental.
Hay que trabajar en equipo, sin olvidar la individualidad de cada perro, con sus puntos fuertes y los no tan fuertes, sabiendo como afrontar esas debilidades. Un perro motivado y mentalmente fuerte puede lesionarse por ese exceso de ganas, por el contrario, un perro más vulnerable mentalmente puede quemarse anímicamente, siendo más difícil curarlo que muchas lesiones. Somos el cerebro del equipo y es nuestro deber estar pendientes de cada eslabón. No "debemos", es nuestra obligación."Quemar" un perro a principios de temporada puede fastidiarnos el desarrollo normal de la misma. Obviamente, ésto es un aspecto secundario puesto que el objetivo no tiene que ser que la temporada vaya bien,sino que los perros estén en perfecto estado,sanos y contentos. Parece una perogrullada, pero por desgracia a veces se ven casos en los que el orden de prioridades es otro.
La sensación al arrancar por primera vez en septiembre, y ver que los perros van coordinados, trabajando y con ganas más allá del ansia inicial es de las mejores motivaciones que podemos encontrarnos para hacer las cosas bien.
Ahora es el momento de pulir fallos, de acostumbrarlos a que salgan tranquilos, a que mantengan la concentración, a controlar el equipo,y no que el equipo nos controle a nosotros. Son muchos detalles a tener en cuenta para que desperdiciemos el tiempo sólo en acumular km o mejorar la velocidad.
Buenos inicios y buen mushing!
